Unificar la fecha de la Pascua es posible
Fuente: http://www.oikoumene.org/es/novedades/news-management/a/sp/article/1722/unificar-la-fecha-de-la-p.html 28.05.09 08:33
La esperanza de que, en el futuro, todos los cristianos puedan celebrar la Pascua el mismo día fue reafirmada por un seminario ecuménico internacional organizado por el Instituto de Estudios Ecuménicos en la Universidad Católica Ucraniana de Lviv, el 15 de mayo.
El problema es tan antiguo como la misma iglesia: al comenzar a difundirse el cristianismo en todo el mundo, los cristianos llegaron a resultados diferentes sobre cuándo conmemorar la muerte y resurrección de Jesucristo, debido a las diferencias en los relatos de los cuatro evangelios sobre estos acontecimientos.
Los intentos de establecer una fecha común para la Pascua comenzaron con el Concilio de Nicea el año 325. Este Concilio estableció que la fecha de Pascua fuera el primer domingo después de la luna llena siguiente al equinoccio de primavera. Sin embargo, no determinó los métodos que habrían de utilizarse para calcular cuándo es la luna llena o el equinoccio de primavera.
Hoy en día las iglesias ortodoxas utilizan el 21 de marzo del calendario Juliano como fecha del equinoccio, mientras que las iglesias de la tradición occidental – es decir las iglesias protestantes y la Católica – basan sus cálculos en el calendario Gregoriano. La diferencia resultante entre las fechas de Pascua puede llegar a ser de hasta cinco semanas.
Los participantes en el seminario de Lviv, entre los que figuraban teólogos ortodoxos, católicos romanos y protestantes de diversos países europeos, hicieron suya una solución de compromiso que se propuso en una consulta del Consejo Mundial de Iglesias (CMI) celebrada en Aleppo, Siria, en 1997. La propuesta consistía en mantener la norma de Nicea, pero calcular el equinoccio y la luna llena utilizando los datos astronómicos exactos disponibles actualmente, en lugar de los empleados hace muchos años.
Los participantes en el seminario expresaron la esperanza de que los años 2010 y 2011, en que la coincidencia de los calendarios dará lugar a una fecha común de la Pascua, sirvan como período en el que todos los cristianos unan sus esfuerzos "para hacer que esta coincidencia no sea la excepción, sino la regla". También hicieron votos para que una fecha común de Pascua basada en un cálculo astronómico exacto sea celebrada por todos los cristianos el 8 de abril de 2012.
No obstante, el seminario titulado "Una fecha común para la Pascua es posible" no dejó de tener en cuenta lo que los participantes consideraron el problema principal: "No son los cálculos, sino las complejas relaciones y la falta de confianza entre las diferentes denominaciones cristianas debida a antiguas divisiones."
El teólogo ortodoxo francés Prof. Antoine Arjakovsky, director del Instituto de Estudios Ecuménicos, señaló: "Aunque el cálculo astronómico de la norma de Nicea se acerca más al calendario Gregoriano que al antiguo calendario Juliano, las iglesias Católica Romana y protestantes dieron un paso hacia las iglesias ortodoxas en Aleppo, aceptando que se debería establecer la fecha de Pascua sobre la base de un calendario cósmico, y no con una fecha fija, como se había propuesto anteriormente a la reunión interortodoxa en Chambésy en 1977."
Otros participantes que intervinieron en el seminario ecuménico fueron la pastora Dr. Dagmar Heller, profesora del Instituto Ecuménico de Bossey y secretaria ejecutiva de la Comisión de Fe y Constitución del CMI, el sacerdote jesuita Milan Zust, miembro del Pontificio Consejo para la Promoción de la Unidad de los Cristianos, y el profesor Konstantin Sigov, director del Centro San Clemente de Kiev, Ucrania.
Además de los alumnos del Instituto de Estudios Ecuménicos – consorcio entre la Universidad Católica Ucraniana, la Universidad Nacional de Lviv y varias otras universidades europeas – participaron en el seminario representantes de las principales denominaciones de la ciudad: las iglesias ortodoxas ucranianas de los patriarcados de Moscú y Kiev, así como la Iglesia Ortodoxa Autocéfala de Ucrania, las iglesias Griega y Católica Romana, la Iglesia Apostólica Armenia, la Iglesia Bautista y la Iglesia Evangélica.
El problema es tan antiguo como la misma iglesia: al comenzar a difundirse el cristianismo en todo el mundo, los cristianos llegaron a resultados diferentes sobre cuándo conmemorar la muerte y resurrección de Jesucristo, debido a las diferencias en los relatos de los cuatro evangelios sobre estos acontecimientos.
Los intentos de establecer una fecha común para la Pascua comenzaron con el Concilio de Nicea el año 325. Este Concilio estableció que la fecha de Pascua fuera el primer domingo después de la luna llena siguiente al equinoccio de primavera. Sin embargo, no determinó los métodos que habrían de utilizarse para calcular cuándo es la luna llena o el equinoccio de primavera.
Hoy en día las iglesias ortodoxas utilizan el 21 de marzo del calendario Juliano como fecha del equinoccio, mientras que las iglesias de la tradición occidental – es decir las iglesias protestantes y la Católica – basan sus cálculos en el calendario Gregoriano. La diferencia resultante entre las fechas de Pascua puede llegar a ser de hasta cinco semanas.
Los participantes en el seminario de Lviv, entre los que figuraban teólogos ortodoxos, católicos romanos y protestantes de diversos países europeos, hicieron suya una solución de compromiso que se propuso en una consulta del Consejo Mundial de Iglesias (CMI) celebrada en Aleppo, Siria, en 1997. La propuesta consistía en mantener la norma de Nicea, pero calcular el equinoccio y la luna llena utilizando los datos astronómicos exactos disponibles actualmente, en lugar de los empleados hace muchos años.
Los participantes en el seminario expresaron la esperanza de que los años 2010 y 2011, en que la coincidencia de los calendarios dará lugar a una fecha común de la Pascua, sirvan como período en el que todos los cristianos unan sus esfuerzos "para hacer que esta coincidencia no sea la excepción, sino la regla". También hicieron votos para que una fecha común de Pascua basada en un cálculo astronómico exacto sea celebrada por todos los cristianos el 8 de abril de 2012.
No obstante, el seminario titulado "Una fecha común para la Pascua es posible" no dejó de tener en cuenta lo que los participantes consideraron el problema principal: "No son los cálculos, sino las complejas relaciones y la falta de confianza entre las diferentes denominaciones cristianas debida a antiguas divisiones."
El teólogo ortodoxo francés Prof. Antoine Arjakovsky, director del Instituto de Estudios Ecuménicos, señaló: "Aunque el cálculo astronómico de la norma de Nicea se acerca más al calendario Gregoriano que al antiguo calendario Juliano, las iglesias Católica Romana y protestantes dieron un paso hacia las iglesias ortodoxas en Aleppo, aceptando que se debería establecer la fecha de Pascua sobre la base de un calendario cósmico, y no con una fecha fija, como se había propuesto anteriormente a la reunión interortodoxa en Chambésy en 1977."
Otros participantes que intervinieron en el seminario ecuménico fueron la pastora Dr. Dagmar Heller, profesora del Instituto Ecuménico de Bossey y secretaria ejecutiva de la Comisión de Fe y Constitución del CMI, el sacerdote jesuita Milan Zust, miembro del Pontificio Consejo para la Promoción de la Unidad de los Cristianos, y el profesor Konstantin Sigov, director del Centro San Clemente de Kiev, Ucrania.
Además de los alumnos del Instituto de Estudios Ecuménicos – consorcio entre la Universidad Católica Ucraniana, la Universidad Nacional de Lviv y varias otras universidades europeas – participaron en el seminario representantes de las principales denominaciones de la ciudad: las iglesias ortodoxas ucranianas de los patriarcados de Moscú y Kiev, así como la Iglesia Ortodoxa Autocéfala de Ucrania, las iglesias Griega y Católica Romana, la Iglesia Apostólica Armenia, la Iglesia Bautista y la Iglesia Evangélica.
